No basta con vivir a medias y esperar abatido la rencarnaciòn del alma despojada del sacrificio de volver a comenzar. No basta...y sin embargo no es suficiente.
de longevo tiempo,ese tiempo inalcanzable desde la cima de un cráter en erupción. Vale la pena vivir en el claustro de la soledad, que vivir solo en buena compañía.